7 octubre 2010
4
07
/10
/octubre
/2010
15:32
A la intemperie, siento un dulce animal
respirar aquí, entre amapolas,
las flores le parecen algo extraño, el animal no.
Cálidamente protegida de todo o que debía tocarla
Ella escribe unos versos
con una pena de pájaro.
El pájaro hace nido en la cáscara de mis párpados
dispuesto a quedarse aquí.
Ella contempla su mano como una isla de luz
entre las amapolas.
Bajo los párpados ya es un sueño lejano,
abre la sombra y toca un rizar de insectos
Ella sueña
como si este día no fuera gema de púrpura
del animal que me respira tierno y apagado
en su país inocente.
(Corral de Bustos, provincia de Córdoba, Argentina)